Primavera

Bueno, llevo una semana sin escribir... lo mejor que puedo contar es que ya se va notando un tímido calor en la calle. Suficiente para cambiar mi abrigo doble por uno simple, dejar las botas de invierno indefinidamente, y mirar por la ventana con un poco mas de alegría que de costumbre. Ayer estuve con Emmanuel tomando un té cerca de la universidad, y tenían un par de mesas en la calle, estuvo muy bien tomar algo allí. Aunque este invierno haya sido el primero para nosotros, y además haya sido menos duro que otras veces, ya estábamos deseando un poco de sol (del que calienta).

Y una anécdota curiosa... La semana pasada la secretaria del departamento me llamó para decirme que ya tenían lista la llave que había encargado. Por lo visto, en octubre pedí una llave para un armario de un despacho en el décimo piso. Curioso, porque yo trabajo en el tercero. Pero bueno, para qué rechazar algo gratis. Me fui al décimo piso en busca del despacho, a ver si me interesaba tener una llave del armario, y el caso es que tal despacho no existe. Al final ha resultado que la llave era, lógicamente, para uno de los cajones de mi propio despacho. Por cierto a ver si hago alguna foto y la pongo, para que veáis mi cubículo.

La semana pasada también estuve con mi contable. Sí, el tipo que va a hacer mi declaración de impuestos porque yo no he hecho una en mi vida. Si todo va bien me devolverán un par de miles de dólares, porque en esta provincia los postdoc no pagamos impuestos provinciales. Por otra parte, yo creía que me habían pagado de menos por las clases que doy, pero no es así, los 1200 dólares se quedan en 740 tras los impuestos. Genial.

También me he apuntado a un curso de conversación de francés en la universidad, y a un par de cursos de tango. Así que andaré ocupadillo fuera del trabajo. Y espero que en el trabajo también, últimamente estoy bastante pasota, así que para ponerme las pilas y de acuerdo con esa perla de sabiduría que reza "cuanto más tienes por hacer, más haces", estoy acumulando trabajo: John quiere que haga alguna cosa más con lo que estaba haciendo antes de navidad, y Emmanuel y yo trabajaremos juntos un poco a ver si se nos enciende alguna bombilla, y también tengo mis antiguas investigaciones a las que vuelvo un poco ahora.


Para concluir, este fin de semana volví a quedar con mis amigos de Bolivia, Hugo y Karol (las fotos son de la barbacoa de mi cumple el verano pasado) después de muchos meses y fuimos a bailar salsa cuanto con algún amigo más, hacía muchos meses que no bailaba y estuvo bien, aunque también se hizo un poco raro, supongo que por la falta de costumbre.

Esta semana no hay grandes planes, aunque mañana haré algo interesante: John me ha hablado de un bistro que van a cerrar mañana, y vamos a ir a ver si venden cosas a precio razonablemente barato, a lo mejor me hago con alguna delicia culinaria a precio de Burger King.

Un poco harto

Hoy estoy un poco harto de lo mal que va el mundo (declaración de intenciones acerca de este post). No es que haya pasado nada, simplemente estoy

harto de que los que tienen el poder (que les hemos dado los demás) hayan hecho de este mundo todo un desastre,

harto de que el gobierno de mi país solo hiciera una buena cosa en el mundo, y al principio: sacar las tropas de Iraq, y de que no hagan nada más, como el resto de Europa,

harto de que nos manipulen para que creamos que estamos muy bien y que ellos evitarán las cosas malas que nos puedan pasar,

harto de que la gripe aviar y el cambio climático sean cosas que nos asustan... preguntad a la mitad de la humanidad que no tiene comida, agua, medicinas y que es masacrada por la otra mitad, si a ellos les importa,

harto de que nos hagan creer que perder lo que tenemos sería terrible, cuando lo terrible es lo que hacemos a muchos otros para mantener lo poco que tenemos.

harto de estar rodeado de gente hipócrita, que sacrificaría a otros seres humanos alegremente para no perder las comodidades de la vida que tiene, pero que creen tener superioridad moral e intentan que los demás también lo crean,

harto de gente frases del tipo "yo no soy racista, pero..." que invariablemente terminan con un comentario racista,

harto de encontrarme con gente que también cree que lo estamos haciendo mal, pero que están tan perdidos a la hora de hacer cosas como yo.

Si después de esto todavía estáis conmigo, os dejo dos cosas más: la primera, os recomiendo una novela de Saramago llamada "Ensayo sobre la lucidez". Saramago se hace un poco pesado porque le gusta evitar ciertos signos de puntuación, pero por lo demás el libro es muy bueno, de lo mejor que he leído.

Lo segundo es una poesía de Mario Benedetti.

HOMBRE QUE MIRA A OTRO HOMBRE QUE MIRA

Vos también estás asombrado
no querés admitir la salvación por el infierno
o acaso no podés creer que haya
cualesquiera hijos de vecino
que metan la vida prójima en el cepo

que un tipo pueda respirar
y buscar el amor
y faenar el tiempo
y besar a sus hijos
y decir oraciones
y hasta cantar bajito
después de haberse traicionado
corrompido
                          enmerdado
metiendo la vida prójima en el cepo

vos
como yo
estás asombrado

en realidad no hay fogata para ese humo
ni siquiera hay sed para ese cántaro
tal vez no haya pájaros para ese viento
para ese inmune no haya después

las venganzas yacen calmas y feroces
la paciencia se arruga de tanta espera
vos te preguntás donde está la cosecha
y sin embargo tu estupor intacto
demuestra por lo pronto que algo cosechaste

vos mirás como inmóvil y te miro mirar
somos dos conjeturas incómodas fraternas
no entendemos un pito de esta infame justicia
de esa fábrica de odios que propone el olvido

a lo mejor te vino la infancia en un destello
sentiste la sesera                esa insensible
pensaste el corazón                ese impensable
pero ni así te acostumbraste a esa saña piadosa
a esa masacre tan emputecida
así que no aflojaste ni un suspiro
y te seguiste asombrando te seguiste

yo te miro mirar como inmóvil
pero claro la cosa no se arregla
con miradas
                           ojeadas
                                             o vistazos

qué tal si nos arremangamos vos y yo.

Primer aniversario

Hace un año a estas horas estaba yo en un avión, de camino a Montreal, para pasar tres meses aquí y prepararme para venirme después durante un año a trabajar. Venía sin conocer a casi nadie, un poco la ciudad, y muy poquito sobre mi futuro. Y desde el momento en que pisé Montreal (dentro de unas horas hará un año de mi llegada), tuve muy claro que no había que mirar atrás, porque así sólo consigues no fijarte en lo que te espera. Claro que ha habido momentos malos, cómo no, pero estoy contento conmigo mismo, pues he pasado de estar rodeado de gente del mismo color, nacionalidad, idioma, religión, formación, etc. a que cada nueva persona que conozco sea un mundo por descubrir. Podría darle muchas vueltas a todo esto, y estoy seguro de que el David empezó esto hace un año lo haría, pero eso es sólo uno de los muchos cambios que uno sufre con el tiempo, más aún cuando también cambias de continente: si piensas demasiado no ves lo que tienes delante.

Gracias a todos los que leáis de vez en cuando este blog, aunque no esté muy seguro ya de quiénes sois (en principio iba a ser un sitio donde contar mis pequeñas aventuras a mis amigos, pero nunca se sabe cómo acabará lo que empezamos). Hay mucho más que contar que lo que se ve aquí, no soy como otros a los que veo plasmar todo lo que sienten en su rincón en internet, simplemente no me sale. Pero me ha gustado mucho poder contaros un poco de todo. Sigo en ello...

Lluvia

Ayer llovió por primera vez desde noviembre o así. La lluvia es peor que la nieve, más desagradable, más sucia e incómoda, pero trae consigo recuerdos del final del invierno pasado, cuando llegué aquí. Con un poco de suerte, el frío que hemos tenido hasta ahora no volverá ya tan fuerte, la nieve se derretirá pronto, y volveremos a esperar a los cercanos días a medio solear en los que cambias el grueso abrigo por el liviano paraguas. Ahora me acuerdo otra vez de esta poesía.

Buen fin de semana si leéis esto a tiempo.

A esperar

Hoy tenía cita en el hospital, por la hernia que tengo, y por fin he conseguido que me pongan en lista de espera. Me han dicho que tardarían algunos meses en llamarme. En fin, ya lo intenté en España y no lo conseguí antes de tener que venirme, así que estoy bastante contento. Por otra parte, estoy metido en lo de buscar apartamento, ayer vi uno que me gustó, pero seguro que puedo encontrar algo más o menos igual de bueno y todavía más barato; como tengo todavía muchos meses no hay prisa.

Y poco más que contar, el trabajo como siempre. Bueno, no exactamente igual, John se ha resbalado y caído un par de veces (hay mucho hielo por las calles estos días) así que tengo que sustituirle de vez en cuando en clase. No me molesta mucho, y los estudiantes me prefieren (John es un buen tipo pero muy desorganizado). He preguntado por ahí si voy a poder dar clase en vez de simplemente los tutoriales (clases de ejemplos y ejercicios) pero me toca esperar porque hay muchos profesores. Y lo malo es que hay muchos tan malos como John, cuando los investigadores jóvenes podríamos dar esas clases con mucho gusto (las pagan bien) y hacerlo mejor, pero claro, la universidad tendría que gastar dinero.

En fin, ojalá tuviera aventuras que contar, pero se nota que el nivel de las novedades que me encuentro va bajando...

La locura de Tom Cruise, o la fama en internet

Hoy he leído que le han dado uno de esos premios anti-Oscar a Tom Cruise y su novia o lo que sea, por pesaos, que están todo el día en las revistas del corazón. De hecho el premio se llamaba algo así como "a los más cansinos". Aquí es todavía peor todo este tipo de cosas, porque en los supermercados tienes literalmente docenas de revistas del corazón distintas; doy gracias por no haber tenido la ocurrencia de comprarme una tele.

El caso es que hay una escena bastante lamentable que se ha hecho un tanto famosa: es Tom en el programa de Oprah Winfrey (presentadora famosísima de la tele, como María Teresa Campos pero peor todavía), hablando de su amor, y en concreto saltando sobre un sillón como un poseso (poseído...). Ha habido todo tipo de cachondeos al respecto, y claro, han empezado los montajes de vídeo (imitando al Episodio III de Star Wars, por ejemplo):



Me ha recordado a mi querido Star Wars Kid, algunos ya lo conocéis. Es un chaval (¡de una ciudad de Quebec!) que hace pocos años se grabó a sí mismo imitando a Darth Maul, un personaje del Episodio I de la Guerra de las Galaxias. Desgraciadamente para él, algunos compañeros de clase encontraron el video original y lo distribuyeron. Pero la cosa creció, en poco tiempo se hizo famoso y alguien hizo la primera edición digital. Y luego siguieron otras, desde Terminator hasta Matrix pasando por Braveheart. Hay muchos aquí, aquí y aquí. Hasta tiene un cameo en un videojuego. Os pongo una de las muchas, muchas ediciones.



Que no os pillen nunca en una de éstas, corréis el riesgo de que os conozcan en internet (algunos ya me han sufrido con el Photoshop de manera privada). Que todos hemos bailado alguna vez así.

Tareas nuevas y viejas

Aparte del trabajo, se me acumulan las tareas externas. La semana que viene veo por fin a un especialista, porque tengo por ahí una hernia y algún día tendré que operarme. Claro que, como sea igual que en España, que empecé a mirarlo en el 2004 y cuando me vine todavía no me tocaba...

También estoy mirando para cambiarme de apartamento, seguro que me ahorro más de 100$ al mes sin tener que irme muy lejos, y con el sueldo que tengo todo se agradece. Estaré en el apartamento de ahora hasta que termine el contrato el 1 de julio con lo que la mudanza puede ser divertida; pero mejor ir mirando con antelación, total, ya tengo que decir en un mes si renuevo o no, y será que no.

También me toca ya ir preparándome para la declaración de la renta. Que es algo que no he hecho en mi vida, gracias al maravilloso sistema de becas en lugar de contratos que he disfrutado hasta mis 28 años (claro, a cambio de esa "ventaja" está el no haber cotizado ni un día a la SS). Para evitarme líos contrataré un contable, que son sólo unos dólares y esto tiene pinta de ser un lío (como "Quebec is different", aquí tenemos impuestos federales y provinciales, con los que algunos quizá tengamos que hacer dos declaraciones).

Y dentro de un par de meses tengo que renovar mi permiso de trabajo y mi contrato de postdoc. Queda mucho tiempo, pero me tiemblan las piernas cuando pienso en los papeleos potencialmente mortales que me quedan por pasar, así que iré desde ya tirándole indirectas a John al estilo de Gila: "alguien tiene que renovar a alguien", "alguien es un asesino"... huy, ésa no.