martes, 30 de enero de 2007

Preocuparse a lo tonto

Ayer fui al estomatólogo gastroenterólogo, para ver qué es lo que me pasa en el estómago desde hace ya tanto tiempo. Después de pruebas y más pruebas, parece que tengo NERD, que significa algo así como "reflujo gastroesofágico no erosivo", o sea ácido y tal pero sin daños en el esófago.

(Nerd [nɜ:d] (n): Empollón.)

Así que me ha mandado unas pastillas (un tanto caras) y seguramente con eso mejore bastante. Aparte de tener que cambiar mis hábitos de alimentación, claro.

Lo más importante de todo esto es que ya llevaba muchas semanas, de hecho meses, preocupado por el tema. Que si oyes cáncer por allí, que si oyes otra cosa por allá, que si te duele más que antes y a ver si va a ser algo serio de verdad... he pasado muchas mañanas agobiado porque me solía doler el estómago casi siempre, así que mis desayunos venían servidos con depresión.

Pero tuve en buen juicio de hablarlo con gente, que me dio otros puntos de vista, me contó alguna que otra experiencia, y así me fui calmando, viendo que estaba sacando las cosas de quicio. Después, cuando me empezaba a acojonar un poco alguna vez, aprendí a concentrarme en un pensamiento fuera de ese ciclo negativo: me imaginé a mí mismo en el futuro, en la puerta del hospital después de ver al médico, diciéndome a mí mismo que había sido muy tonto por haberme preocupado tanto; que tras las buenas noticias que el médico me daría, yo me reiría porque en realidad si tuve algo malo: los muchos malos ratos que pasé preocupado.

Y ese futuro acabó pasando ayer. Me dije a mí mismo todo lo que tenía planeado, me reí cariñosamente de mí mismo (para qué maltratarme), y me volví a la oficina. Espero recordar esta lección en el futuro.

miércoles, 24 de enero de 2007

El gobierno me responde

Hace ya mucho tiempo, algo antes de mi cumpleaños, me dio por mandar un mensaje al presidente del Gobierno. No recuerdo sobre qué exactamente, algo sobre la política exterior en Oriente Medio. En su momento recibí este mensaje:

Esta es una respuesta automática.
El Presidente del Gobierno ha recibido su correo electrónico, que ha quedado registrado con el número 0843980608E
En su caso, por correo electrónico, recibirá una contestación a su escrito.
Para cualquier tema relacionado con este asunto, le ruego que utilice nuevamente el formulario de la página Web de La Moncloa, haciendo constar el número de registro arriba indicado. Si por el contrario, para atender a este correo, utiliza en su ordenador la función de “responder”, por razones técnicas, su mensaje no podrá leerse.

Y hace dos días he recibido la respuesta.

Por indicación del Presidente del Gobierno, contesto al escrito que le ha dirigido y agradezco su muestra de confianza al transmitirnos sus reflexiones sobre el conflicto de Oriente Próximo y la posición que el Gobierno español ha mantenido en el mismo.


En relación con ello, quiero señalarle que entre los principios que inspiran la acción de este Gobierno se encuentran el multilateralismo y el respeto de la legalidad internacional.


Desde la convicción de que la única vía para alcanzar la paz en Oriente Próximo pasa por la negociación y por el respeto de la legalidad internacional y, en definitiva, por la plena aplicación del principio de arreglo pacífico de las controversias, puedo garantizarle que el Gobierno de España no cesará en poner todo el empeño necesario para lograr ese fin.


Finalmente, he de informarle que en los mismos términos nos hemos dirigido a otras personas que han transmitido al Presidente preocupación análoga a la expresada por usted. Reciba mi más cordial saludo. -----------. Director del Gabinete de la Presidencia del Gobierno.


Así que ya sabéis, ¡sí que contestan! Aunque tarden un huevo...

martes, 23 de enero de 2007

Quedar

A veces, cuando uno queda para hacer algo, no sólo queda para una vez.

De ahora en adelante, cada doce de mayo tendré una cena romántica, o un pequeño viaje, o alguna sorpresa... o si no puede ser, cada doce de mayo al menos me parare a recordar los buenos momentos. Y a prepararme para que siga habiendo más.

Cada doce de mayo, menos el de este año... que será mucho más especial.

miércoles, 17 de enero de 2007

Hoy, felicidad es...

... despertarte y notar, a pesar del sueño acumulado de muchas semanas de mal dormir, el subidón que todavía te dura de la primera sesión de gimnasio, ayer por la tarde...

... un sol radiante, calentándote la cara a través de la ventana mientras desayunas, una buena costumbre aprendida la primera semana tras la operación...

... el mismo sol en la calle a pesar de los -20 grados...

... que la comida mejicana no te haya sentado mal al estómago a pesar de que lleve semanas doliéndote...

... que pusieran a Estopa en el restaurante y te pusieras un poco melancólico...

... que tu amiga se arrancara con un par de frases en español en ese momento...

lunes, 15 de enero de 2007

Por fin... triple

Finalmente, esta mañana he ido a echar los papeles para casarme (¡por fin!). Me han puesto alguna pega, porque mi partida de nacimiento es sólo una fotocopia con un sello oficial. La fecha será el 12 de mayo probablemente, o muy cercana si no. Ah y cómo no, por las molestias, he soltado unos cientos de dólares.

Precisamente hoy, hay una nevada bastante gorda, aunque no hace mucho frío (-7 grados hace un rato). A ver si no pasa como en las últimas semanas, que nieva al principio pero luego el finde se estropea y no hay quien vaya a la nieve. Anuncian mal tiempo, por fin.

Y por fin... tengo blog nuevo. Por ahora sólo lo he creado, no tengo intención de escribir más que muy de vez en cuando en los próximos meses.

jueves, 11 de enero de 2007

Relojes impuntuales

Ha costado darse cuenta de que ha empezado el año: vuelta de vacaciones, preocupación por el padre de Rana, la confirmación de un nuevo trabajo (nuevo país, nuevo capítulo de mi vida, nuevo blog) que no acaba de llegar...

Como si relojes y calendarios te ignoraran, ahora que durante un corto periodo de tiempo todo va más lento para ti. Como cuando vas en autobús en visita turística y te pierdes las calles y los monumentos porque estás mirando al suelo buscando algo que se te ha caído.

Y el tiempo loco, ayer menos diez grados, mañana por encima de cero, que juega contigo y no te deja acabar de creerte que estás en el invierno canadiense.

Algo no acaba de cuadrar, los engranajes no están del todo en su sitio y el reloj chirría. Pero siempre optimismo al final, siempre.

lunes, 8 de enero de 2007

Una paliza para David

El sábado por la mañana, Rana me llevó a que me pegaran una paliza, por la que además pagué $35. Según ella era un masaje, porque me duele un poco la espalda de vez en cuando; pero la masajista se empleó a fondo para acabar con las tensiones acumuladas: parte del masaje es clavar codos y dar puñetazos en las zonas a "relajar". No fue nada agradable, aunque no dolió demasiado porque por lo visto mi espalda estaba bastante bien. Por otra parte, Rana sufrió antes que yo, y luego sufrió conmigo (aunque seguro que una parte de su subconsciente opinaba que yo me merecía algo parecido, por las pequeñas cosas que van acumulando en una relación).

Además, mis amigos Emmanuel and Yukiko me dicen que vaya a hacer yoga con ellos, pero una variante: "yoga caliente". Lejos de lo que vuestra imaginación os lleve a pensar, es simplemente yoga a unos 40 grados, igual que en la India. Por lo visto, las primeras veces es una tortura.

Y encima la semana que viene empiezo en el gimnasio. Lo que hay que hacer para cuidarse un poco... menos mal que en cuanto a comer, me he acostumbrado ya a hacer vida sana (bueno, más que antes).

miércoles, 3 de enero de 2007

Semana movidita

Ufff, el final y comienzo de año han sido ajetreados. Los dos últimos días en Madrid, corriendo sin parar para ver a los amigos que me faltaban. Luego la vuelta a Montreal, sin incidentes; la fiesta de fin de año, que hubo que preparar, y eso unido a que yo me tomara las uvas en el último momento a las seis de la tarde: llamé a casa justo en el momento en que daban los cuartos, volviendo de comprar las uvas en el super. Y encima, me quedé esa noche a dormir en casa de Rana para no volver tan tarde con el frío, y su padre se puso malo... pasamos el día en urgencias, volvimos a casa, al día siguiente otra vez a urgencias, y esta noche le han operado. En fin, movidito va el año por ahora.