Últimos agobios antes de vacaciones
He pasado unos días sin escribir porque el curso de matemáticas que estaba haciendo informalmente ha terminado con unos ejercicios para casa, a modo de examen, y el día de entrega fue ayer. Como se me juntó eso con corregir exámenes, he tenido que dejar los deberes para el finde, que me he pasado en el despacho (incluída casi una noche entera). La verdad es que no había ninguna necesidad, claro, porque ya he aprendido algunas cosas en el curso y la nota no me vale para nada, pero siempre está la cuestión del orgullo personal. Eso también lo he aprendido: ya me he probado a mí mismo varias veces que puedo hacer las cosas bien, así que menos tomarse cosas a pecho.
En cuanto al curso, han suspendido un 28%, pero en las otras dos clases de la misma asignatura han suspendido más o menos un 10%. No sé si es que los otros profesores han sido más generosos (el examen era el mismo y hemos hecho corrección común así que habrá sido con la nota de corte) o si es que realmente ellos enseñan mucho mejor que yo. O quizás son casualidades de la vida. En fin, enseñando también se aprende, en invierno lo haré mejor.
Mañana salgo para Madrid, así que la siguiente entrada será desde allí, a menos que me dé por escribir algo más mañana.
0 comentarios:
Publicar un comentario